Nuestras soluciones de filtración protegen el motor de su barco
BOLL & KIRCH ofrece una protección fiable contra daños causados por finos catalíticos. Para evitar el desgaste excesivo de los componentes críticos del motor, se recomienda mejorar la filtración del sistema de combustible antes de que el motor resulte dañado por los finos catalíticos nocivos. Como experto contrastado en la filtración en motores marinos, BOLL & KIRCH equipa la mayor parte de todos los motores con componentes de filtro. Con la experiencia y el know-how que nos aportan nuestros 30 años de experiencia, estamos en una posición óptima para proporcionar asesoramiento y servicio a nivel internacional. Nuestra red globaly nuestro servicio completo siempre ofrecen un funcionamiento fluido del buque.
BOLL & KIRCH ofrece soluciones individuales de filtro fino para sistemas de suministro o refuerzo, ya sea para sistemas existentes o para el diseño de nuevas construcciones.
Eliminación de finos catalíticos en sistemas de suministro
El filtro automático se instala antes de las bombas del sistema de refuerzo, aún en el circuito frío del sistema de combustible. Aquí, la temperatura de funcionamiento sigue siendo de unos 100 °C y la presión de funcionamiento es de 5 a 10 bares.
Dado que el caudal en este punto corresponde aproximadamente al consumo del motor, el filtro se puede diseñar con un tamaño más pequeño que en el sistema de refuerzo. Además, la contaminación se filtra antes del sistema de refuerzo.
Eliminación de finos catalíticos en sistemas de refuerzo
El filtro automático se instala después de las bombas de presión y después del sistema de calefacción. Aquí, la temperatura es de 140-160° C y la presión de funcionamiento es de 12 a 16 bares.
El caudal es de 2 a 3 veces superior al del circuito frío, lo cual requiere una superficie de filtro alta y, por tanto, un filtro automático superior. Sin embargo, el filtro automático proporciona una protección óptima justo antes del motor.
Eliminación de finos catalíticos antes del depósito de servicio
Aquí, el filtro automático se instala aguas abajo del purificador, antes del depósito de servicio. Una de las principales ventajas de esta instalación es que el número de inversiones de flujo del filtro puede dar una indicación directa sobre la calidad del combustible líquido o la eficiencia del purificador antes de que el combustible líquido se almacene en el depósito de servicio. Por lo tanto, ambos componentes pueden ajustarse mejor entre sí.
Como de costumbre, una parte del combustible líquido se recircula en el tanque de sedimentación y otra parte pasa a través del purificador, y de este modo se consigue el filtrado. Esto tendrá un efecto positivo en la eficacia de separación del purificador y el filtro. Una instalación de este tipo se puede realizar en las construcciones nuevas y en las ya existentes.
Dado que los finos catalíticos se descargan en una fase tan inicial, puede evitarse la acumulación de finos de catalizador en el tanque de servicio. Para las embarcaciones ya existentes, la ventaja es que no se deben realizar cambios en un sistema de suministro y refuerzo existente. En caso de que la presión de funcionamiento aguas arriba de la posición del filtro automático sea inferior a 1,5 bares, el filtro automático debe estar presurizado por una bomba adicional, para que el filtro automático funcione correctamente.